Imprimir

Lápices: acceda a las preguntas y respuestas


Acabado

Las acuarelas, normalmente, se enmarcan tras cristal y no necesitan barnizarse. El cristal las protege contra la suciedad y en parte también contra los efectos nocivos de la luz sobre los colores. Sin embargo, en caso de que la acuarela sirva para un fin ilustrativo, por ejemplo, vaya pasando de mano en mano durante una presentación, puede resultar dañada por la humedad o la suciedad. En este caso, es mejor barnizarla. El barniz Talens de acuarela mate 050 es invisible después de seco y hace la acuarela resistente al agua. Ahora, la pintura está protegida contra la humedad y la suciedad probablemente podrá limpiarse. Este barniz puede usarse también para lápices de acuarela.
Una de las características específicas de un cuadro al pastel es su apariencia aterciopelada. Si se fija la pintura, esta apariencia cambiará, dependiendo de la cantidad de fijador que se aplique. Si se aplica demasiado fijador, se oscurecerán los colores de un momento a otro y ni siquiera se hará la pintura resistente al barrido. Así que ¡es peligroso!
Por simples razones de apariencia, algunos pintores no fijan sus trabajos, asumiendo el riesgo de la vulnerabilidad. Una manera segura es fijar ligeramente cada capa de pastel después de aplicada. Si se quiere, la última capa puede dejarse sin fijar o fijarse también ligeramente. Otros pintores barnizan abundantemente sus trabajos sabiendo que los colores se oscurecen. Esto, desde luego, exige experiencia.
La punta de los lápices de colores está hecha de pigmento, caolín (un tipo de arcilla muy fina), cera y celulosa. La cera es responsable de la emisión cremosa de color típica del lápiz y hace los colores resistentes al agua. Sin embargo, la cera tiene además tendencia a formar en el papel una capa blanquecina llamada "floración" que desaparece si se aplica una delgada capa de fijador concentrado.
Cuanto más fijador, más brillante será el resultado. Si se desea un acabado mate, puede utilizarse también un barniz acrílico mate. Se puede usar al mismo tiempo el fijador para hacer el dibujo resistente al borrado.

 

Técnica

La punta de los lápices de colores está hecha de pigmento, caolín (un tipo de arcilla muy fina), cera y celulosa. La cera es responsable de la emisión cremosa de color típica del lápiz y hace los colores resistentes al agua. Sin embargo, la cera tiene además tendencia a formar en el papel una capa blanquecina llamada "floración" que desaparece si se aplica una delgada capa de fijador concentrado.
Cuanto más fijador, más brillante será el resultado. Si se desea un acabado mate, puede utilizarse también un barniz acrílico mate. Se puede usar al mismo tiempo el fijador para hacer el dibujo resistente al borrado.

 

Soportes

En principio, puede utilizarse cualquier soporte, siempre que no sea demasiado liso. Normalmente se usa papel. Un papel de estructura algo granulada permite una mejor emisión de color que un papel liso, como puede ser el papel de copiar.
En principio, con lápices de acuarela puede trabajarse sobre cualquier tipo de papel, aunque los resultados más bellos se obtienen sobre papel de acuarela. El papel de acuarela tiene la superficie revestida de goma por lo que, en el deslavado de los colores, el papel no absorbe el pigmento y los colores permanecen puros. Además, la goma evita que el papel se ondule cuando se usa mucha agua.
En principio, puede emplearse cualquier tipo de soporte, siempre que su superficie tenga suficiente estructura.
Por lo general, se utiliza papel. En esta técnica, se aplica polvo seco de pastel sobre el papel. Al contrario que la pintura, el pastel no posee la propiedad de adherirse al sustrato mediante un aglutinante. El polvo del pastel se queda colgado en las fibras del papel. Para que retenga mucho color, la superficie del papel debe tener una estructura determinada.
El papel de dibujo es apropiado, por ejemplo, para la creta de Siberia, pero es demasiado liso y  duro para agarrar suficiente cantidad de pastel.
En el comercio, existen diferentes tipos de papel de pastel de numerosos colores. Un soporte coloreado tiene la ventaja de que no es necesario frotar el trabajo. Como la superficie del papel posee una estructura adecuada, no quedará completamente cubierta cuando se hace un trazo con la parte plana de la barra de pastel, el color del papel será visible a través de los colores del pastel. Si el papel es blanco, será muy difícil conseguir sombras, pero, si es de color, este color formará parte de un todo armónico.
Si se usan otros soportes flexibles, como tela, es importante que se enmarque el cuadro de manera que el soporte no se mueva, pues, las vibraciones pueden desprender las partículas de pastel.